Artículo escrito por autora invitada
Tienes una cita con alguien a quien quieres sorprender y te gustaría ser capaz de preparar una cena agradable en casa…
Estás cansado de tener que salir a comer fuera, el fin de semana con los niños, porque no sabes por donde empezar a preparar una comida especial, llamativa, sana y diferente…
O simplemente te apetece darte el gusto, una noche al salir de trabajar, de hacerte una buena cena, y disfrutar de algo diferente, a un sandwich o un plato precocinado.
Te apetece comer bien. Pero tienes poco tiempo. Este artículo es para ti. Te lo mereces.
Soy Carmen, madre de 3 niñas y química. Mi afición desde que tengo uso de razón es la cocina.Conocí a Ana hace más de 2 años y comparto con ella su filosofía de que se puede trabajar, cuidar nuestra familia y cuidarnos nosotros.Yo misma he trabajado 8 horas al día con 2 niñas pequeñas, pero para mí el comer bien es un placer. Con muy poco esfuerzo puedes cambiar tu alimentación y la de tu familia. Por eso, su último artículo sobre educar a los niños a comer bien jugando me parece muy interesante.
Al principio te puede costar algo más, pero es cuestión de práctica y de organización, de recurrir a platos sencillos, sanos y sabrosos.Cocinar puede ser relajante y una forma de compartir un rato con nuestros hijos. Según su edad pueden colaborar en tareas más sencillas o complicadas y cuando colaboran en la cocina, valoran más lo que están comiendo.
Si te alimentas bien te encuentras mejor, con mejor humor y más energía. Es el objetivo de este blog, darte herramientas para que puedas canalizar tu energía con alegría. Yo no dude en descargarme el calendario de crecimiento personal para padres 2015.
Somos lo que comemos y seguro que tienes claro:
- que las frutas y verduras frescas cocinadas en casa alimentan más que un plato envasado que lleva muchos aditivos y está preparado bastante tiempo.
- que una alimentación sana y equilibrada hace que no tengas déficit de vitaminas, hierro… y te encuentres mejor.
- que recurrimos a platos precocinados, casas de comidas para llevar, restaurantes… y nuestra salud y nuestro bolsillo lo notan. Cocinar en casa es sano y barato.
Muchos nos hemos independizado o casado, pasando de que nos cocinaran nuestras madres, a malcomer lo que pillamos y nos encontramos que se nos hace un mundo cocinarnos para nosotros o para nuestros hijos.
Hoy Ana me abre su blog para traerte un menú sencillo para que puedas preparar una comida o una cena tanto para una pareja, tus hijos o para disfrutarlo tú porque te lo mereces.
Te traigo una ensalada muy sencilla de preparar, uno huevos típicos de Oriente Medio similares a nuestros huevos al plato, un postre de galletas con yogur y fresas. Espero que te guste.
Ensalada de lechuga con dátiles:
Las ensaladas son unos entrantes muy versátiles y sanos. Puedes hacer esta receta tal cual o aprovechar lo que tengas en la nevera. Por ejemplo puedes sustituir los dátiles por pasas o dados de carne de membrillo y las nueces por pipas peladas, avellanas… Experimenta y varía y verás como descubres muchos sabores nuevos.
Ingredientes para una fuente de ensalada
- ½ bolsa de lechugas variadas o ½ lechuga lavada y troceada
- 1 puñado de tomates cereza o un tomate troceado
- 1/ tarrina de queso fresco preferiblemente de cabra
- 6-8 dátiles cortados en tiras a lo largo
- unas pocas nueces peladas y troceadas
- Sal, aceite y vinagre de módena al gusto
Elaboración:
Corta los tomatitos por la mitad, el queso en tacos y los dátiles en tiras a lo largo.
Mezcla con la lechuga y las nueces.
Aliña al gusto justo en el momento de servir. Yo suelo añadir muy poco vinagre de módena.
Aquí te dejo otra receta de ensalada más elaborada para otro día.
Shakshuka
La shakshuka es un plato muy típico en el Norte de África y en Oriente Medio. Es un plato sencillo de preparar, resultón y que está muy rico. La receta está adaptada del libro Jerusalem, de Ottolenghi.
Ingredientes para 4 personas:
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1/2 cucharadita de Harissa (la venden en tiendas árabes y en grandes superficies)
- 1/2 cucharadita de sal
- 2 cucharadas de concentrado de tomate
- 2 pimientos rojos grandes cortados en rodajas de 1/2 cm
- 4 dientes de ajo picados
- 1 cucharadita de comino molido
- 800 g de tomates maduros troceados (o tomates enteros en conserva escurridos y troceados)
- 8 huevos
- Labneh o yogur para acompañar
- Pan de pita o de barra para untar
Elaboración:
Calienta el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio y añade la harissa, el concentrado de tomate, pimientos, ajos, comino y la sal.
Remueve y cocina a fuego medio unos 8-10 minutos hasta que veas que los pimientos se van poniendo tiernos.
Añade el tomate troceado, un pelín de azúcar para quitar la acidez y remueve a fuego lento unos 15 minutos hasta que la salsa haya espesado.
Pruébala por si necesita más sal, más harissa…
Haz 8 pocillos con una cuchara sopera.
Rompe los huevos con cuidado y échalos con cuidado en los pocillos. Puedes mezclar un poco con un tenedor las claras con la salsa.
Cuece a fuego lento unos 8-10 minutos hasta que las claras estén cuajadas pero las yemas estén todavía blandas.
Aparta la sartén del fuego, espera un par de minutos para que deje de hervir y sírvelo caliente acompañado de labneh o yogur y pan.
Aquí tienes una publicación más detallada en mi blog.
Triffle de fresas:
El triffle es un postre muy sencillo que consiste en capas de bizcocho o galletas, algún ingrediente cremoso como yogur, nata o natillas y fruta. Son muy vistosos al ir presentados en capas y puedes hacer raciones individuales o uno más grande. Aprovecha las frutas de temporada y combínalas como más te gusten.
Este postre no se debe preparar con demasiada antelación, pero realmente es tan sencillo de hacer que lo puedes hacer un rato antes de la comida.
Ingredientes para 4 unidades:
- 3 yogures griegos
- 12-14 fresas
- 16 galletas Lotus (las prefiero al ser caramelizadas, se mantienen crujientes y las encuentras en cualquier supermercado) o unas 12 galletas Marías.
- Unas cucharadas de mermelada de fresa
- Unas ramas de hierbabuena para adornar, si te apetece.
Elaboración:
Parte las galletas a trozos y coloca un poco en el fondo de cada vaso.
Echa un poco de mermelada, una capa muy fina que no tiene por qué ser uniforme. Si echas demasiada quedará demasiado dulce.
Echa una fresa laminada en cada vaso.
Añade unas cucharadas de yogur.
Repite las capas anteriores.
Decora con una fresa laminada y una rama de hierbabuena si tienes a mano.
Aquí tienes una publicación de otro postre de frutas en mi blog.
¿Te parece complicado?
No me des una respuesta ¡Hazlo! y si te parece sencillo, compártelo con tus amigos. Te darán las gracias.
Gracias por abrirme tu blog y poder transmitir que se puede comer bien y sentirse mejor.
Un beso!
Tenemos que seguir, Carmen.
Pero sé, como tú, que lo vamos a conseguir: ser independientes (dinero), vivir en familia (conectados) y con salud (comida y deporte)
Tampoco es tan complicado!
Hola Carmen!
Ya mismo le paso las recetas a mi marido 🙂
Es verdad que con unos pocos ingredientes puedes hacer una comida sana y rápida.
Gracias, un abrazo
Qué maravillas… ¡Ñam!