Me consta, porque lo vivo cada día en mi trabajo, que hay mucha gente buscando cómo sanar la autoestima, perdida en algún momento de sus vidas. Aunque también están quienes nunca la tuvieron.
El caso es que los temas relacionados con la autoestima van, aparentemente, más unidos con el género femenino. Se nos atribuye la baja autoestima sobre todo a nosotras, cuando también hay muchos hombres que se infravaloran y sufren por creerse insuficientes.
Lo que te acabo de soltar es una perogrullada, porque sobra decir que tanto mujeres como hombres podemos perder nuestro poder en algún momento de nuestras vidas y olvidar nuestro amor propio.
Y lo que es una obviedad se convierte en un problema, cuando a nivel consciente sabes todo lo que te estoy contando pero tu inconsciente te cuenta otra historia.
Y esto, precisamente, tiene mucho que ver con la comunicación.
Exactamente, con el tipo de comunicación que tienes contigo mismo primero, y con el resto de personas después.
En el mismo orden de cosas, si eres un hombre con síndrome de Superman (y el caso es que esto es lo más habitual), tendrás tendencia a:
- Ser protector.
- Aparentar fortaleza.
- Reprimir tus emociones.
- Intentar cumplir con tus obligaciones en todo momento.
- Correr detrás del éxito profesional.
- Y tener poca comunicación con tu verdadero ser, con esa parte más oculta, más vulnerable.
Todo ello hace que tu autoestima caiga y te olvides de quién eres.
Y es que no te engañes: los hombres, a rasgos generales, sois más torpes a la hora de comunicaros.
Se os ha pegado el traje de Superman al cuerpo hasta tal punto que se os marca la rajita del culete.
Vamos, que estáis algo constreñidos en lo que a comunicación, autoestima o manifestación de emociones se refiere, porque os habéis metido demasiado en el papel de superhéroe.
¡Cuidadín! Que ya hay más de uno pensando:
Ya tenemos aquí a la feminista de turno diciendo tonterías y generalizando
Y es que, efectivamente, soy feminista y estoy generalizando.
No es más que para ponerle humor.
Lo que está claro es que todas las personas, y por lo tanto tú también, arrastramos ciertas cargas que cortan la comunicación con nuestro verdadero ser y que nos hacen sentirnos inferiores.
Estos lastres te bloquean el camino y deterioran tu autoestima. Habrá que identificarlos y soltarlos para vivir con más paz. Aquí es donde entra en juego el Minimalismo existencial.
- ¿Cómo sé qué es lo que ya no necesito seguir cargando?
- ¿Qué aspectos de mí ya no sirven para avanzar?
- ¿Cuándo tengo que soltar una creencia e instaurar otra?
- ¿Qué es para mí lo esencial? ¿Eso, que si no lo tengo, me hace perder la paz?
- ¿Cómo puedo soltar mi capa de Superman y seguir volando?
Si quieres:
- Aprender a comunicarte mejor
- contigo mismo, para consolidar una autoestima más sana donde no te haga falta la capa.
- con otras personas, teniendo así mejores relaciones (en especial, con el sexo contrario y con Superwoman).
- Apartar de tu vida todo lo que te impide aceptarte como eres y seguir avanzando.
- Y usar todas las cualidades que ya tienes para favorecer la consecución de un mundo mejor.
Entonces tendrás que venir conmigo, porque tienes mucho de lo que desprenderte para dejar espacio a que entre todo el amor propio que te mereces.
¿Vamos?
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LA MAL ENTENDIDA IDEA DE SUPERMAN Y SU RELACIÓN CON TU AUTOESTIMA
¿Has visto la peli de Superman alguna vez?
Ya, es una pregunta absurda…
El caso es que el fenómeno de Superman es tan antiguo y está tan integrado en la sociedad, que forma parte del imaginario colectivo.
¿Qué es el imaginario colectivo?
Es un conjunto de símbolos y conceptos en la memoria y la imaginación en una variedad de individuos pertenecientes a una determinada comunidad. La toma de conciencia de todas esas personas, al compartir estos símbolos, refuerza el sentido de comunidad.
A menudo, estas representaciones fantasiosas de la realidad llegan a trascender las mismas circunstancias que se han producido en el mundo real y adquirir la fuerza y la belleza del mito, convirtiéndose en los iconos de toda una etapa en la historia de un pueblo.
Incluso, fíjate que, cuando se acuñó la expresión “imaginario colectivo”, Superman ya llevaba unas cuantas décadas en el mercado.
Pero el imaginario colectivo no es la realidad. La idea que tienes de lo que tiene que ser un hombre, relacionada con la idea de Superman, tampoco es la realidad.
Porque la realidad es aquello que no puede cambiar, lo inmutable. Y cualquier idea representada por el imaginario colectivo es susceptible de ser cambiada y, por ende, no puede ser real.
Por lo tanto, cuando te aferras a ideas que no son la realidad, sufres y tu autoestima decae. Aunque la idea parezca preciosa al principio o incluso, te haya servido en alguna ocasión.
CÓMO ES LA AUTOESTIMA DE SUPERMAN
Si recuerdas bien las películas, la figura de Superman es más potente porque debajo el disfraz, tiene a un chico normal, tirando a “pardillo”, que no es capaz ni de mirar a las personas a los ojos.
Solo cuando este chaval se pone el disfraz, se convierte en el “ideal de hombre perfecto”: fuerte, decidido, seguro de sí mismo, salvador, de buen corazón y que además, desaparece de buenas a primeras, añadiéndole morbo a la relación.
(Luego llegó el de las sombras de Grey y le desbancó, pero ése es otro tema…)
El caso es que debajo del disfraz se escondía una persona muy normal.
Si no le hubiese llegado a picar la araña, la vida de ese chico hubiera transcurrido sin pena ni gloria.
¿Qué ocurre, para ti como hombre, fuera de la ficción?
Como en el imaginario colectivo existe la figura de Superman como icono de los valores masculinos más demandados, finges ser un Superman porque te resulta incluso más fácil que ser tú mismo.
En él ya has identificado las cualidades que supuestamente, le hacen valioso, pero ¿sabrías hacerme una lista tan exacta de tus propias cualidades?
Siempre es más fácil esconderte detrás de personaje que estás representando, que mostrarte como eres y exponerte a ser rechazado.
Cuando encima, ni siquiera tienes muy identificado cómo eres.
Por tanto, podríamos pensar que la autoestima de un hombre de este planeta, que quiere ser Superman, es una autoestima falsa.
Sé de lo que te hablo porque yo también he pasado por ello.
POR QUÉ LA IDEA DE SUPERMAN NO TE BENEFICIA
La idea de Superman no te beneficia, simplemente, porque ese no eres tú.
Es una idea a cerca de un tipo de hombre, que nada tiene que ver con la realidad y que además, carece de cualidades tan importantes como la asertividad y la habilidad para comunicarse.
De hecho, este superhéroe era un poco cafre en lo de comunicarse. Por no hablar de que iba a su puta bola y desaparecía cuando le daba la gana.
Vale, se iba a salvar el mundo pero, como no te lo quería contar, tú no podías saberlo y estabas ahí con el “run run”, comiéndote la cabeza.
Y esto será ficción, pero en la vida real también pasa 😉 La diferencia es que ese que te ha dejado con el “run run” no se ha ido a salvar el mundo ni mucho menos.
¡Venga, hombre!
Desde luego, no queremos hombres así. Al menos yo no los quiero.
Pero en tu inconsciente, después de casi un siglo de la aparición de Superman, ha quedado grabada la idea de que es un buen prototipo de hombre al que puedes aspirar.
Del mismo modo que a muchas mujeres, se nos ha quedado grabada la idea de que ese es el mejor tipo de hombre y seguimos esperando que un día entre volando por la ventana (y de paso, limpie los cristales).
Antes esperábamos al príncipe que venía en el caballo blanco. Hasta que nació Superman y nos dimos cuenta de que lo de volar era mucho más rápido y te ahorrabas tener que limpiar las cacas del caballo.
- Dos párrafos seguidos vinculando el tema de la limpieza con el género femenino. Esto es lo que se llama “inconsciente colectivo”.
Todas esas ideas (que contadas así parecen absurdas) cuando se graban en el inconsciente, entran a formar parte de los programas mentales que te hacen razonar unas cosas pero hacer otras totalmente diferentes.
Ni príncipes ni supermanes, queremos hombres reales. Clic para tuitearComo sabes, tu mente se compone de tres partes diferenciadas mente:
- consciente (racional),
- subconsciente (emocional),
- inconsciente (donde anida el imaginario colectivo y todas aquellas memorias que has heredado).
Cuando una idea se hace tan fuerte que es compartida por el mundo, entra en el imaginario colectivo y en el inconsciente de las generaciones posteriores.
Todo el mundo sabe quién es Superman, todo el mundo asocia determinadas cualidades a este personaje, y a la mayoría le parece que es un prototipo de hombre admirable.
Sin querer, acabas comparándote con un personaje irreal a cuya altura nunca podrás estar. Ello mina tu #autoestima sin necesidad y te aleja de lo que de verdad quieres. Clic para tuitearClaro que para saber lo que quieres y actuar en coherencia, tienes que ser muy consciente del daño que te hacen estos prototipos definidos respecto a lo que tiene que ser un hombre.
Y cuando seas consciente, tendrás que convencer a tu subconsciente para que crea lo mismo que tú y no te sabotee.
LA LUCHA ENTRE SUPERMAN Y SUPERWOMAN Y CÓMO ASI SE HACE AÑICOS TU AUTOESTIMA
La lucha de sexos sigue muy presente en nuestro día a día. Y cansa muchísimo, como todas las luchas.
En mi caso, hace tiempo que dejé de luchar y considero que abandonar la lucha y convertirla en otras cosas (aceptación, paz, amor, libertad, equidad) nos beneficia muchísimo.
Sin embargo, si echas un vistazo al imaginario colectivo del que te venía hablando, las mujeres salimos mal paradas y eso impide que muchas de nosotras tengamos la lucha muy viva en nuestros corazones.
Porque en dicho imaginario colectivo, en el inconsciente del mundo, se ha grabado a fuego que nosotras somos ciudadanas de segunda.
De nuevo, a nivel consciente, a casi todo el mundo le queda claro que esto no es así. Pero recuerda que es el subconsciente el que te domina.
Te pongo un ejemplo totalmente relacionado con la metáfora que sustenta el artículo:
Volviendo al tema de Superman, años después de su aparición le sale una compañera femenina con poderes similares.
Superwoman pensarás, ¿verdad?
Pues no, el personaje en cuestión se llamaba Supergirl.
Vamos, que Superman era un hombre hecho y derecho pero Supergirl era una adolescente en plena pubertad.
¿A ti qué te parece?
¿Por qué Superman es “man” y Supergirl (que tendría que ser Superwoman) es “girl”?
Si no eres muy aficionado al mundo de los cómics, habrás estado pensando durante años, como yo, que la versión femenina de Superman era Superwoman.
Estábamos equivocados, colegui.
Pero si te interesa el tema y sigues leyendo, te darás cuenta también de que, además, Supergirl tenía muchos más poderes que Superman y sin embargo no tiene la misma importancia en el inconsciente colectivo.
Dicen que incluso tenía más fuerza física que él…
Entonces, ¿por qué el icono por excelencia es el de Superman, cuando Supergirl da muchísimo más juego y es más competente en sus funciones de heroína??
(Ea… el femenino de héroe es “heroína”, que suena de todo menos bien).
¿Por qué Supergirl es una segundona?
¡Jolines, que lleva falda y todo!
Las respuestas son muy obvias: hace siglos que se relegó a la mujer a un segundo plano en todos los niveles.
Por eso, es más fácil atribuirnos a nosotras la falta de autoestima. Es una obviedad que las personas marginadas (en este caso las mujeres) tendrán tendencia a tener una autoestima más baja.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que, cuando hay lucha entre dos “bandos”, los niveles de conciencia de ambos bandos suelen ser similiares. Si no, no habría lucha.
Así que, vale decir que si mujeres y hombres aún tenemos conflictos entre nosotr@s es porque no hemos resuelto nuestros conflictos internos y nos encontramos al mismo nivel.
Cuando dos bandos luchan entre sí es porque están en el mismo nivel de conciencia. Clic para tuitearPero no pretendía hacer una disertación sobre el mundo del cómic, sino hacerte llegar la reflexión de que esos ideales de Superman o Superwoman a los que aspiras, lo único que hacen es alejarte. Primero de ti mismo, luego del resto.
Porque tanto Superwoman como Superman son ideales inalcanzables, que te dejan a merced de lo que otras personas esperan de ti.
Y esto es un problema muy gordo tanto para hombres como para mujeres, que determina que aún no nos entendamos.
Al mismo tiempo, esa falta de entendimiento provoca luchas de poder y que no te sientas en igualdad: te sientes por encima o por debajo.
Pero resulta que, tanto sentirse por encima como sentirse por debajo, son dos caras de la misma moneda y solo tienen que ver con tu ego.
De hecho, después de haber leído esto y de considerar que la falta de autoestima es atribuida a las mujeres, podría pensarse que:
- Los hombres se sientes superiores respecto a las mujeres.
- Las mujeres nos sentimos inferiores respecto a los hombres.
Pero esto no es así necesariamente.
Según cuenta el psicólogo catalán Joan Garriga, en su libro “El Buen Amor en la pareja”, sucede más bien al contrario:
- Las mujeres nos sentimos superiores a los hombres.
- Los hombres se sienten inferiores a las mujeres.
Sea como fuere, hasta que no convenzamos a nuestro inconsciente de que todas las personas somos iguales, no habrá nada que hacer. Por muy buenas intenciones que le pongas al tema.
QUÉ PUEDE HACER SUPERWOMAN POR SUPERMAN, Y SUPERMAN POR SUPERWOMAN, PARA VIVIR EN PAZ
Esto que parece tan complicado es la mar de sencillo.
¿Qué puedes hacer para vivir en paz con cualquiera?
Empezar por aprender a vivir en paz contigo mismo.
Cuando una persona tiene la autoestima tocada:
- No se acepta.
- O está intentando cambiarse o se hace la víctima.
- Culpa a otras personas de lo que le ocurre.
- Tiende al pesimismo.
- Le da más importancia a sus “defectos” que a sus “virtudes”.
Y cuando alguien se encuentra en esta situación de “no aceptación” hacia sí mismo y su propia vida, es complicado que acepte a otras personas.
De ahí vienen los combates entre Superwoman y Superman, mientras en la ficción luchan junt@s por el bien de la Humanidad.
Y en este punto sí que es en el que podrías fijarte para seguir trabajando tu verdadera autoestima.
Cuando dos bandos luchan, lo que se pone de manifiesto es una falta de amor propio tremenda. Estamos viendo la paja en el ojo ajeno, sin ver la viga en el nuestro. Clic para tuitearCuando ambos bandos se dan cuenta de esto, pueden unirse en un objetivo común: mejorarse desde dentro para mejorar el conjunto.
Por tanto, no es la falta de aceptación de la otredad lo que genera las luchas. Lo que genera las luchas es la falta de aceptación de un@ mism@.
En realidad, eres una persona muy poderosa. Quizá mucho más que Superman, si no tenemos en cuenta lo de volar y todo eso.
Lo que ha ocurrido es que has olvidado tus poderes. Y cuando tú recuperes tus verdaderos poderes, no solo te ayudas a ti mismo, también nos ayudas a nosotras.
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CÓMO USAR EL MINIMALISMO PARA QUEDARTE SOLO CON LOS PODERES QUE NECESITES EN CADA MOMENTO
Seguro que ya has oído hablar de Minimalismo porque está de moda.
Hace tiempo que vengo utilizando esta filosofía de vida para trabajar con mis clientas.
Confieso (y es lo que más me gusta) que el Minimalismo me sirve para todo. Para ir deshaciéndome poco a poco de cualquier aspecto de mi vida que me esté suponiendo una carga en mi evolución.
De esta manera, antes de trazar un plan para conseguir un objetivo concreto, conviene indentificar:
- Qué es lo que te está impidiendo conseguir lo que quieres y por tanto, sobra en tu vida.
- Cómo deshacerte de ello.
Y una vez conseguido esto, ya tienes el camino más despejado hacia tu objetivo.
En estos momentos, tienes a tu disposición muchos poderes que llevas utilizando muchos años, y que puede que ya no te estén sirviendo.
Sin embargo, por costumbre y apego, te aferras a la idea que tienes de ti mismo, comportándote como te comportas siempre. En lugar de decir adiós al personaje que te has creado, cuando ya no te sirve.
Y, al mismo tiempo, hay poderes que traes de serie pero que al no haber aprendido a utilizar, estás desaprovechando.
Ahondar en ti mismo y conocer cuáles son estos poderes, te ayudará a sanar tu autoestima y hacer del mundo un lugar mejor.
CUÁLES SON LOS PODERES QUE CREES QUE TIENES
Como te decía, hay un montón de poderes que probablemente ya tengas identificados en ti y estés utilizando desde hace tiempo:
- Fuerza
- Pragmatismo
- Ambición
- Racionalidad
Y todo eso está muy bien mientras no lo confundas con:
- Bloquear las emociones
- Posicionarte por encima de quienes consideras más débiles
- Enfocarte únicamente en el desarrollo profesional
- Fingir invulnerabilidad
Porque esto es lo que pasa muy a menudo:
Tienes una idea de cómo tendrías que ser, en función de la información externa que has ido recogiendo y si no te sientes así, te esfuerzas por aparentarlo.
Todo ello, como hablábamos más arriba, te aleja de ti mismo y se acaba convirtiendo en una carga en tu camino.
CUÁLES SON LOS PODERES QUE DE VERDAD NECESITAS
Del mismo modo que usas ciertos poderes o has tenido que aprenderlos, porque pensabas que te ayudarían… tienes otros poderes que quizá, por desconocimiento o porque pensaste que no se adaptaban a ti, podrás aprender a utilizar ahora para avanzar más rápido en tu camino.
Cuáles son estos poderes:
1. La comunicación contigo mismo.
En algún momento de tu proceso te desconectaste de la fuente y dejaste de escuchar a tu “Yo Esencial”.
Seguramente, la presión social pudo más que tu alma y te fuiste al lado oscuro (ahora he cambiado de película… lo siento)
Ahora ha llegado el momento de volver a escucharte, dejarte hablar, manifestar lo que de verdad desea tu alma.
2. La comunicación con el resto.
Cuando aprendas a comunicarte contigo, o bien te resultará fácil comunicarte con el resto o, directamente, ni siquiera necesitarás hacerlo.
Sin embargo, teniendo en cuenta que eres un ser social, gregario, habrá momentos en lo que comunicarte con el resto sea algo grandioso. Pero ya no te comunicarás de la misma manera y tus relaciones serán mucho más sanas y verdaderas.
3. La vulnerabilidad.
Las personas con síndrome de Superman o de Superwoman huyen de la vulnerabilidad.
Piensan que mostrar sus debilidades les hace exponerse demasiado al dolor.
No se trata de contarle a nadie que tú también sufres y sangras. De lo que se trata es de aceptar tus emociones, tal y como vengan, en lugar de taparlas.
4. El respeto.
Parece que las personas que se hacen las fuertes se respetasen más.
Esta tampoco es la realidad.
Por lo general, si aparentas ser algo que no eres, te estás traicionando a ti mismo. Por tanto, ahí no hay ningún respeto.
Y el caso es que defiendo la idea de que uses tus poderes según los necesites, incluso fingiendo cuando sea por tu bien.
Pero esto es un arma de doble filo que solo te beneficia si tienes claro por qué usas cada poder en cada momento. O sea que para que te beneficie, tienes que tener un gran conocimiento de ti mismo.
5. La escucha activa.
Voy a lanzar otra perogrullada ¿vale? Ahí va:
Los hombres no escucháis muy bien, vais más a vuestro aire.
De nuevo, generalizando muchísimo. Sorry me!
También es verdad que esto de la “escucha activa” no es una cualidad que sobre, ni entre hombres ni entre mujeres.
Sin embargo, pararte de verdad a escuchar a la vida, o a las personas con las que compartes esta vida, te enseña casi tanto como escucharte activamente a ti mismo.
6. La aceptación.
Cuando te aceptas tal como eres y aceptas todo lo que te rodea, se acaba la lucha.
Cuando aceptas de verdad, dejas de imponerle a nadie cómo tendrían que ser las cosas.
Simplemente dejas que la vida te sorprenda, poniendo todo tu amor en ello. Porque la aceptación y el amor propio van de la mano, y son una de las herramientas más poderosas que tienes a tu alcance en estos momentos.
Por supuesto, hay muchos más poderes que puedes potenciar, pero éstos son fundamentales si quieres empezar a sanar desde dentro.
CÓMO DESHACERTE DE LOS PODERES QUE YA NO NECESITAS, PARA DEJAR ESPACIO A LOS NUEVOS PODERES
Te he dado algún adelanto en apartados anteriores.
Para deshacerte de lo que ya no necesitas sería interesante:
1. Acepta lo que es tal y como es: tú y el mundo.
Cuando aceptas y la lucha desaparece, solo queda espacio para el amor. Antes de decir adiós a lo que no necesitas, hay que aceptar que ahora mismo, está formando parte de tu vida.
Cuando lo has aceptado sin condiciones, solo entonces, puedes desprenderte de ello de verdad.
2. Conócete para que sepas qué poderes necesitas usar en cada momento.
En la fase anterior, la de la aceptación, ni siquiera necesitas saber de qué te quieres desprender y de qué no.
Es ahora, en este punto 2 cuando, una vez aceptadas las cosas como están, toca tomar decisiones.
Pero para saber qué es lo que ya no te sirve y qué es lo que te gustaría que entrase en tu vida, tienes que conocerte.
Para ello, tendrás que escucharte, como te comentaba antes.
Cuando te escuchas y te vas conociendo, usas tus diferentes poderes según los vas necesitando: no siempre hay que ser fuerte, ni ambicioso, ni escuchar activamente a alguien que te da exactamente igual.
3. Toma decisiones.
Un vez que has identificado aquello de lo que te quieres desprender, empieza a hacerlo.
Hazte una lista y ve una por una, con todo lo que hayas apuntado. No pretendas hacerlo todo a la vez.
Deshazte de las cosas de una en una (ideas, creencias, objetos, relaciones, hábitos…) a un ritmo que te resulte agradable.
4. Empieza deshaciéndote de las ideas.
Son las creencias inconscientes las que marcan el ritmo de tu vida: por eso la lucha entre Superman y Superwoman sigue latente.
Estás programado para hacer frente a esa lucha, con las armas que tienes, pero pensando que es una lucha que no va contigo (porque como te digo, son ideas inconscientes).
Y eso te pasa con estas ideas y con muchas otras relaciones con cómo eres, cómo vives y cómo te gustaría ser y vivir.
Y ahora quizá estés pensando: “si son ideas y creencias inconscientes que no sé que tengo, ¿¿cómo me voy a deshacer de ellas??”.
Muy fácil.
Observa cómo es tu vida y qué reflejan de ti las personas con las que te relacionas normalmente.
Por ejemplo: si siempre te falta dinero, la vida te está reflejando que hay creencias de escasez o no merecimiento. Échale un vistazo a las leyes del espejo.
Cuando algo de lo que vives no es como te gustaría, puede estar siendo provocado por alguna de tus creencias.
Por eso es tan importante que tengas claro que la idea de hombre y mujer que tienes no solo es sesgada, sino que viene programada.
Esto no se arregla con manifestaciones (que están muy bien y sirven para otras cosas) sino liberando tu inconsciente personal para influir en el inconsciente colectivo.
5. Perdónate y deja de juzgarte.
Perdónate por todo aquello que no supiste hacer mejor y que aún arrastras. De lo primero que te tienes que desprender, para poder avanzar, es de la culpa.
Tenemos tendencia a culparnos por todo.
A esa culpa consciente, habría que añadirle también la que traes de serie de forma inconsciente. El hecho de sentirte culpable y enjuiciarte constantemente, determina que hagas lo mismo con el resto de personas.
No te perdonas a ti, no perdonas a los demás. Y para arreglar esto, solo habría que entender algo muy sencillo: si tú hubieras nacido de la misma forma que esa otra persona, en la misma familia y hubieras vivido exactamente las mismas circunstancias, habrías hecho lo mismo que esa persona a la que juzgas.
Nadie, independientemente de la vida que lleve, puede hacerlo mejor de lo que ya lo está haciendo. Porque si pudiera hacerlo mejor, lo haría.
Es más, cuando pueda hacerlo mejor, así lo hará. Mientras, es imposible.
Cada cual, en cada momento, con las herramientas que tiene, lo está haciendo todo lo mejor que puede.
Así que cuando vayas a juzgarte a ti, recuerda que lo haces lo mejor que puedes y perdónate por no poder hacerlo mejor en ese momento. Y cuando vayas a juzgar a otra persona, recuerda que tú, en su lugar, habrías hecho lo mismo. Y perdónate también por haberla juzgado.
Que entiendas esto salva tu mundo y también el mío.
CONCLUSIONES
Solo tienes un problema en tu vida: la falta de amor.Y es el problema común que tiene el mundo entero. Clic para tuitearTodas las personas contribuímos a perpetuar estos “problemas amorosos” a través de nuestros programas mentales. Tanto hombres como mujeres.
Por mucho que a nivel consciente estés en contra del machismo, por poner un ejemplo relacionado, para actuar verdaderamente como una persona que busca la igualdad tendrás también que poner esa conciencia en coherencia con tu subconsciente.
Si a nivel consciente piensas que todas las personas somos iguales en derechos, pero en tu subconsciente de siglos y siglos está grabada la creencia de que las mujeres somos inferiores ¿cómo crees que actuarás?
Habrá un conflicto entre lo que piensas y lo que sientes y eso te hará sentirte mal contigo mismo.
Así que empezar por revisar los #programasmentales que les dicen a los #hombres que son superiores, “supermanes”, y que como tal se tienen que comportar, es un buen punto de inicio para sanar tu autoestima. Clic para tuitearLos mismos programas que nos dicen a nosotras que somos heroínas pero que, al mismo tiempo, tenemos que ocupar un segundo plano para que estos “supermanes” mantengan su autoestima intacta y no entren en colapso.
Y éstos son los verdaderos problemas del mundo, a mi parecer claro.
Cuando te das cuenta de que solo eres y solo puedes ser #amor y te vuelves a conectar con la Fuente de ese amor, entonces es cuando el #consciente y el #subconsciente van entrando en coherencia. Clic para tuitearPor eso me parece tan importante aplicar el Minimalismo, cada vez que sientas que hay algo en tu vida que no marcha como te gustaría, algo que sobra, algo que bloquea.
El Minimalismo existencial te ayuda a quedarte con lo esencial, con lo que tú verdaderamente necesitas para vivir en paz contigo.
Y para que un hombre como tú viva en paz necesita darse cuenta de que es puro amor, de que está bien expresarlo y comunicarse con él y con el mundo que le rodea, desde un lugar que está muy dentro de ti y donde solo hay luz.
Pero creo que ya está bien de hablar yo, ahora te toca a ti. Me encanta escuchar la visión que tienen los hombres sobre esto.
¿Has sentido alguna vez que con tu forma de comportarte te estabas traicionando?
¿Sientes, como me pasa a mí, ese inconsciente colectivo en tus propias carnes? ¿Dirías que tu autoestima es una autoestima sana?
Soy Tania Carrasco y trabajo para mujeres con síndrome de Superwoman, exigentes y perfeccionistas, para ayudarles a simplificar su vida a través del Coaching y el Minimalismo. De este modo, consiguen vivir más tranquilas, sentirte más libres y dejar de castigarse por no ser perfectas.
Sigue a Tania en Facebook , Instagram y Twitter o reserva una sesión de valoración gratuita con ella aquí.
Mariví Porras dice
¡Felicidades por el artículo Tania!
Cómo sanar la autoestima de un Superman a través del minimalismo existencial (y con la ayuda de Superwoman), un título muy, pero que muy atrayente.
Es genial que se hable sobre la autoestima de ambos sexos, no exclusivamente de la de la mujer. Que como muy bien has reflejado en tu artículo es algo que compartirnos, y que no hay que ocultar detrás de ninguna capa, máscara, ni disfraz, sino como nos dices hay que aprender a sanarla, para hacerla nuestra amiga a través de ese minimalismo que cada día percibo que está más presente en cierta parte de la sociedad, empezando por mí misma. ¡Menos es más! 😉
Comparto la lista de los 6 poderes que de verdad necesitamos. Y tomo nota de cómo deshacerme de los poderes que ya no necesito, para dejar espacio a los nuevos.
Estoy totalmente de acuerdo contigo en que la lucha de Superman y Superwoman, no beneficia a ninguno de los dos Superhéroes, sino todo lo contrario, fortalece y potencia esa baja autoestima de ambos sexos. Como dices, “la aceptación, paz, amor, libertad, equidad, es lo que sí nos beneficia muchísimo a ambos”, lo que hace que nuestra autoestima esté por las nubes, sea sana y disfrutemos sobrevolando el Universo con nuestros “súper poderes” 🙂
Cuando hombres y mujeres dejemos de competir, de intentar ser superiores unos a otros, de compararnos, y aprendamos que estamos aquí para sumar, para colaborar, crecer y aprender todos de todos y de todas, nuestra baja autoestima pasará a un segundo plano y la trasformaremos en AMOR y RESPETO hacia nosotros mismos, y hacia los demás. La comunicación y la concienca es clave para ello.
Gracias Tania por reflejar una verdad que muchos y muchas siguen ocultando tras esa máscara y/o disfraz que para los cómics está muy bien, pero para la realidad… 😉
¡Un fuerte abrazo!
Tania dice
Muchas gracias por tu comentario Mariví!
Comparto todo lo que dices porque hablas justamente de la esencia del artículo.
El día que entendamos que somos partes indispensables de una misma cosa y que, incluso con nuestras diferencias, todo lo que podemos compartir es para sumar, el mundo ya no necesitará que finjamos ser Superhéroes ni Superheroínas,
Además, tenía ganas de hablar más concretamente del hombre, puesto que mi trabajo va muy enfocado a la mujer a pesar de que trabajar con hombres me encanta.
Sin embargo, como una vez me dijo una mujer a la que admiro, «no podemos librar todas las batallas», y yo elegí a la mujer como base de mi trabajo. Lo que no significa que no entienda a los hombres, que no quiera ayudarles o que considere que ellos tienen la culpa de algo, porque para nada es mi creencia.
Creo firmemente que JUNT@S somos invencibles.
Gracias compañera!
Un abrazo,
Tania
Sergio Melich dice
Lo que digo siempre también aplica aquí: cuando deje de ser rentable (económicamente y en «crédito social») ahondar en la brecha y mantenerla abierta, cambiará todo. 🙂
Mientras no seamos «super-chero» vamos bien. 😛
Algunos puntos me hacen pensar en adagios, proverbios y refranes. Como generalizaciones también son excelentes, y no siempre desatinados en representar de forma rápida y más o menos certera una realidad.
Otros puntos no los discutiría por medio de texto en internet. Demasiadas posibilidades de que me tenga que deshacer en matices, justificaciones y demases para intentar pasar bajo el radar de las hordas de afectados por la ofendiditis. x)
Dicho esto, ¡que nadie traiga kryptonita negra a la sala!
Un abrazo.
Marta Bernal dice
¡Hola, Tania!
Antes de nada darte la enhorabuena por el artículo que has escrito. Es excelente lo bien explicado que lo expones todo.
Hay que quererse, seas hombre o mujer; dejar de lado querer ser un super héroe y aceptarnos tal y como somos para poder vivir desde el amor.
Ojalá tu artículo ayude a más personas a darse cuenta de ello. Ya que la consciencia es el primer paso para dejar de darse cabezazos contra la misma piedra 😉
Enhorabuena de verdad por el post. ¡Me ha encantado!
Te mando un fuerte abrazo :*