Aprovecha esta oportunidad y disfruta de una vuelta al cole organizada.
¿Cuándo comienzo a planificar?
Pues ya ¿no?
Si eres de las personas que continuamente se ven desbordadas por los quehaceres diarios y sin tiempo (o eso crees) para ponerte a planificar y empezar a gestionar de forma eficiente el tiempo, te muestro la fábula del leñador:
Una persona pasea por el bosque y se encuentra con un leñador muy ocupado en cortar en pequeños trozos, a toda prisa y con gran dificultad, un tronco de árbol ya caído. El paseante se acerca para ver por qué se afana tanto el leñador y le dice “Perdone, pero me he fijado en que su hacha está totalmente desafilada, ¿Cómo es que no la afila?”. El leñador respondió agotado suspirando: “No tengo tiempo ni para eso, mire todo lo que me queda por cortar”.
El seguir utilizando una herramienta ineficaz, hace que trabajes mucho más y que lo hagas de forma ineficiente. ¿Cuándo quieres afilar tu hacha y ser efectivo en la utilización de la misma?
Aprovecha la oportunidad
Comenzamos un nuevo curso escolar, ya estamos en septiembre y con un ojo miramos atrás observando todavía el buen sabor de este verano:
¡qué verano y que descanso más bueno!
y con el otro ojo, nos encontramos con:
¡se acabó lo bueno!
Pues, tengo que decirte que estás ahora mismo en un momento idóneo para crear tanto en ti como en tu entorno, el mejor de los planes:
¡Hacer lo que te gusta, cómo hacerlo y además disfrutar de ello!
¿Suena bien?
Año tras año, nos encontramos con la oportunidad de crear para nosotros un mundo mejor, poner en marcha aquellos planes que tenemos y saber como gestionar los que tienen una motivación menos fuerte. Esta oportunidad se duplica, ya que para unos el comienzo del año es al mismo tiempo que el curso escolar, vamos lo conocido como ¡Vuelta al Cole!, y para otros es el propio comienzo del año. Estamos de suerte, podemos apoderarnos de estos dos momentos para poder tener una vida mucho más serena, tranquila y lo vital: ¡disfrutar!
#1 ¿Sabes cómo planificarte?
¿Has pensado en qué te puede ser beneficioso planificar tu día a día?
Una planificación eficaz en nuestra vida laboral, y en nuestra vida privada, hace que tengamos mayor sensación de control sobre nuestra vida y el futuro, y para mirar al futuro siempre hacemos planes.
¿Los has hecho para estas vacaciones?
¿Anticipaste los planes?
…. y si no ha sido en vacaciones, seguro que ha habido muchas ocasiones en las que has hechos planes.
Para mejorar y saborear la planificación, te propongo tomar como referencia estos tres apartados:
- Tener el deseo
- Para conseguir mejorar tu planificación, es indispensable tener el deseo, dado que los deseos son el motor de conseguir el éxito. El éxito que tengamos, dependerá́ de cómo logremos controlar nuestros deseos y de cuántos de ellos podamos materializar.
- Simplificar y sistema
- En muchas ocasiones buscamos la fórmula más complicada para poder conseguir lo que deseamos. Simplificar es una de las reglas vitales para que podamos tener una mejor vida, y además utilizar un sistema. Este es el pilar para simplificar y poder organizarte y planificarte. Crear sistema va a hacer que disfrutes de todo lo que te rodea, de lo que haces y de cómo lo haces.
- Los beneficios de tu planificación
- Conocer en qué priorizas.
- Distribuir tu tiempo según las cosas que tienes que hacer día a día.
- Orientar tus esfuerzos a lo que importa, donde tú aportas valor.
- Delegar, plantearemos si determinada actividad puede ser realizada por nosotros o necesitamos que la realice otra persona, dependiendo del coste de su realización.
#2 ¿Qué te aleja?
Identificar las conductas que hacemos de forma habitual y que nos alejan de una buena planificación, es importante. A continuación un detalle de algunas de estas conductas:
- Cargarte de tareas que no te corresponden.
- Hacer todo con prisa, como si se acabara el mundo.
- Pensar que solo tú haces bien las cosas, o que si no las haces tú, quedan sin hacer.
- Tratar de no ser TODOPODEROSO y OMNIPRESENTE, hay tareas que te requieren y otras que no.
Una mala gestión del tiempo es la consecuencia de actuar por impulsos, funcionando con viejas costumbres como respuesta a las circunstancias. Dichas costumbres, son conductas que has ido construyendo progresivamente, en el subconsciente, por debajo de nuestro nivel de alerta, o lo que es lo mismo, de forma automática.
#3¿Qué elementos tenemos dentro de nuestra planificación y que servirán para lograr un buen plan de acción, eficaz y preciso?
A continuación te enumero algunos conceptos importantes que tenemos que tener en cuenta para proceder a traducir nuestras ideas y deseos, en un plan de acción conciso y válido.
- Evaluación del coste de tu propio tiempo:
- Creación de hábito de evaluar el coste del tiempo de todas las actividades que realizas, ver si tengo que realizarlas yo o proceder a su delegación, en virtud de coste actividad/valor de mi tiempo.
- Acciones prioritarias materiales:
- Identificación de aquellas actividades tangibles que son prioritarias y te acercan a tu objetivo o aquello que te has propuesto conseguir.
- Acciones prioritarias inmateriales:
- Identificación de actividades que producen beneficios intangibles, siendo una fuente de equilibrio mental y de energía.
- Acciones secundarias:
- Actividades que no son principales en el quehacer diario ni en la consecución de nuestros objetivos y que hay que invertir poco tiempo o tender a su eficiente ejecución para emplear el mínimo tiempo posible.
- Acciones necesarias:
- Son aquellas acciones que siendo prioritarias o secundarias, son imprescindibles en su realización. Tenemos que realizarlas de modo imperativo y su realización supone un bienestar y un cometido correcto por su ejecución.
- Acciones urgentes:
- Son actividades cuya necesidad surge a corto plazo y bien se tienen que realizar por una naturaleza imprevisible o bien se deben a una deficiente planificación y se ejecutan de forma apresurada y poco programada.
Teniendo el deseo de mejora en la planificación de nuestra actividad diaria, te darás cuenta de las posibilidades que hay de concentrarse en nuestras tareas principales y llegar al punto que te has propuesto.
Igualmente, tenemos que reservar y priorizar intervalos de tiempo para las tareas principales, son las que se tienen que realizar diariamente y no es posible terminar el día sin completarlas.
Una vez que se tiene el firme deseo de mejora, esta nueva etapa se hará extensible al resto de las personas que te rodean, para lograr la máxima eficacia en la organización del tiempo.
¿Necesitas algo más para organizarte?
Cuéntamelo en los comentarios, y te daré mi visión al respecto.
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Mª José dice
Este artículo me toca el corazón uuffff, no estoy nada organizada y voy a salto de mata.
Es triste pero la historia del leñador es la mía… no me he parado a afilar el hacha…¡qué inconsciencia!!
Como voy saliendo del paso, no pongo… pero si un día la afilara… guauuu madre mía sería la reina de Saba.
Gracias por este remeneo.