Salud y lenguaje corporal. ¿Qué tienen que ver con mi negocio?
¿Qué dice tu cuerpo de ti?
Es decir, ¿eres consciente de qué transmiten tu postura y tus gestos? ¿Prestas atención a lo que dices con tus palabras, pero te has olvidado de tu cuerpo?
Varias investigaciones han llegado a la misma conclusión. La parte verbal tan solo constituye el 7% del significado de nuestra comunicación, mientras que el 38% lo otorga el tono, volumen y entonación. El 55% restante forma parte del lenguaje corporal.
Cuando hablas, transmites más con tu cuerpo que con tus palabras. De hecho, incluso tu postura, habla por sí sola. Clic para tuitearTomar conciencia de nuestro cuerpo y cuidarlo es una de las estrategias más efectivas para mejorar no solo la imagen que proyectamos, sino nuestra productividad en el trabajo y por supuesto, nuestra salud.
La salud de tu negocio tiene que ver con tu salud. Al igual que el desarrollo profesional tiene que ver con el desarrollo personal.
Esto es lo que vamos a ver:
- Cómo mejorar tu rendimiento y productividad sin cargarte la salud.
- Cómo una buena postura y un cuerpo libre de tensiones pueden ayudarte a comunicarte de manera asertiva.
- Tres claves para incluir el ejercicio en tu estilo de vida, centrándote en ti y alejándote de las modas.
Estás entrenando tu cuerpo cada día, aunque no lo sepas
Hoy día, el movimiento no es necesario. Nuestros antepasados necesitaban moverse para conseguir comida, pero nosotros no necesitamos movernos para sobrevivir.
De hecho, hemos construido un entorno tremendamente cómodo que nos libera de casi cualquier esfuerzo físico. Pasamos la mayor parte del tiempo sentados, nos movemos poco y siempre de la misma manera.
Al igual que ir al gimnasio cada día crea cambios y adaptaciones en nuestro cuerpo, pasar todo el día sentados también lo hace. ¿Lo habías pensado?
Tu cuerpo se vuelve hábil para aquellos movimientos que repites y torpe y rígido para aquellos que no entrenas. Clic para tuitearDel mismo modo, mientras que unos músculos están tensos, otros se debilitan por la falta de activación. Y estos desequilibrios musculares van dando forma a tu postura.
Probablemente no te cueste ningún esfuerzo pasar horas sentado. Pero observa a los niños: es un castigo obligarles a permanecer quietos.
Y en cambio, quizás sientas que vas perdiendo movilidad en tus hombros, que tu columna se vuelve rígida y te falta flexibilidad. Y si esto viene acompañado de dolor de espalda o incluso falta de energía, que afecta a tu productividad y creatividad…
¡Enhorabuena, tu entrenamiento diario está dando sus frutos!
Somos el reflejo de nuestros hábitos
Una manera sencilla de empezar a cambiar esto es introducir más variedad de movimientos a lo largo del día
Estas son algunas ideas:
- Camina, camina, camina. Ah, y sube las escaleras a pie.
- Levántate de la silla de manera frecuente, al menos una vez cada hora.
- Realiza algunas tareas de pie o caminando, por ejemplo, hablar por teléfono.
- Haz estiramientos en tu silla de trabajo.
- Siéntate en el suelo unos minutos al día mientras lees o tomas un café.
Productividad – Un equilibrio cuerpo y mente
Como emprendedora y empresaria sé por experiencia propia lo que es que tu proyecto te absorba. Tienes tantas ganas e ilusión que puedes pasarte horas sin darte cuenta frente al ordenador olvidándote de comer, descansar o dormir.
Pensar que es solo una etapa, que cuando termines este proyecto tendrás más tiempo, es un error. Los dos sabemos que siempre aparecerá algo urgente y que la lista de tareas por hacer nunca acaba, y más con esa cabeza que dispara ideas sin parar.
¿Piensas que así estás siendo productivo? ¿Cómo vas a rendir al 100% si tú no estás al 100%?
El rendimiento no es solo mental. Tu cuerpo lo dispara o lo frena. Clic para tuitearCuando haces ejercicio, el cerebro recibe más alimento en forma de oxígeno y glucosa, se generan nuevas conexiones neuronales y se liberan sustancias químicas como endorfinas, serotonina o adrenalina, que benefician el rendimiento intelectual.
Por tanto, practicar ejercicio de forma regular mejora tu concentración, memoria, creatividad, capacidad de toma de decisiones y resolución de problemas. Además de elevar el estado de ánimo, reducir el estrés, eliminar el dolor y mejorar la salud cardiovascular. Entre otros muchos beneficios.
A mí, sigue sorprendiéndome el brutal impacto que una sola acción, al alcance de nuestras manos, puede tener en nuestras vidas. Como dice Alejandro Lucía, uno de los investigadores españoles más prestigiosos en fisiología del ejercicio:
La verdadera píldora para todo es el ejercicio. Estimula todos los órganos y sistemas a la vez. Clic para tuitear¿Quieres ser más productivo? Practica ejercicio físico a diario.
Más adelante te voy a contar cómo, para conseguir estos beneficios, no necesitas machacarte ni entrenar durante horas. Es mucho más sencillo que esto, aunque nos hayan contado siempre lo contrario.
Comunicación no verbal a través de la postura
Hasta ahora hemos visto la influencia de un cuerpo fuerte y en forma en tu salud y rendimiento. Ahora vamos a ver cómo tu postura forma parte del lenguaje no verbal y habla por ti.
Nuestra personalidad, vivencias y emociones se graban en nuestro cuerpo.
¿Qué imagen estás proyectando? Por ejemplo, piensa en cómo es tu postura cuando te sientes lleno de confianza. ¿Es diferente a la de una persona insegura? ¿Adoptas la misma posición cuando estás alegre a cuando estás triste?
Son solo unos ejemplos del poder que tiene la expresión corporal, una parte de la comunicación no verbal.
El cuerpo tiene esta capacidad para adaptarse y expresar diferentes estados de ánimo y actitudes. Sin embargo, cuando se vuelve tenso y rígido, en gran parte por la falta de actividad física, pierde esta adaptabilidad y nos encierra en una única actitud. Que es la que proyectas allá donde vas, a menudo, de manera inconsciente.
El método GDS de cadenas musculares describe las siguientes actitudes posturales y su relación con la personalidad:
Por el contrario, cuando tus músculos están relajados y libres de tensión y eres consciente de tu postura, las posibilidades de movimiento se multiplican, ganas expresividad y puedes cambiar de una actitud a otra libremente, como si fueses un gran actor.
- En una presentación de tus servicios, tu postura y lenguaje corporal puede ayudarte a transmitir e inspirar confianza, o por el contrario despertar dudas.
- En una reunión con tu equipo de trabajo puede transmitir tranquilidad a quienes te rodean o alarmarles.
Pero quiero dar un paso más.
Parece evidente que nuestro estado de ánimo influye en nuestro cuerpo y postura. Sin embargo, ¡también sucede a la inversa! Clic para tuitearPaul Ekman, profesor de psiquiatría de la Universidad de California, estudió cómo nuestra postura y expresión afectan a cómo nos sentimos y las emociones que experimentamos. Fruncir el ceño aumenta la secreción de las hormonas del estrés, mientras que sonreír aumenta la liberación de endorfinas.
Amy Cuddy, psicóloga social, descubrió que nuestra postura influye en cómo nos ven los demás, pero también en cómo nos sentimos y nos vemos a nosotros mismos. En sus estudios demostró que adoptar una posición de poder y éxito durante 2 minutos, nos hace sentir más seguros y confiados y reduce los niveles de estrés.
Merece la pena probarlo y en esta charla para TED te lo cuenta al detalle:
Construyendo un plan de acción
Estás decidido a ponerte en forma. Ya sabes que practicar ejercicio tiene un impacto positivo sobre tu salud física y mental, productividad y habilidades de comunicación.
Ahora es el momento de elegir un programa de entrenamiento que se centre en ti, que tenga en cuenta tus gustos, personalidad y ritmo de vida.
Por qué es una mala idea seguir las modas y al gurú del momento
La industria del fitness está de moda.
No paran de surgir nuevas máquinas, métodos y actividades, la mayoría de las veces es lo mismo de siempre con otro nombre más comercial. Acompañados de la ropa y accesorios que necesitas para practicarlos y los suplementos nutricionales en forma de barritas y batidos, que moldearán tu cuerpo de una vez por todas.
Los modelos sonríen y parecen conseguir esos cuerpos perfectos sin una gota de sudor. No nos cuentan el camino real que hay detrás, creándonos unas expectativas falsas de lo que podemos conseguir si nos compramos el nuevo aparato, comemos barritas de proteínas o nos entrenamos como el famoso de turno.
De hecho, a la hora de iniciar un programa de ejercicio,
Dejarnos llevar por las modas no solo es un error, también es una de las principales causas de que abandones la práctica deportiva a corto plazo. Clic para tuitearQueremos imitar a nuestros amigos o a los gurús del ejercicio para conseguir sus resultados. Pero esto no funciona así. Por mucho que te informes sobre el tipo de entrenamiento que lleva o los suplementos nutricionales que toma, estarás siguiendo una rutina que fue diseñada para esa persona en concreto. No para ti.
Somos diferentes y, por tanto, ante los mismos estímulos respondemos de manera diferente.
Nuestros metabolismos, niveles hormonales, biotipo, experiencia previa, lesiones anteriores, estilo de vida, carácter, todo ello influye y hará que no solo no consigas los mismos resultados sino que puede perjudicarte.
Céntrate en ti, experimenta en base a tus gustos, personalidad, condiciones de vida, experiencia previa, historial médico y lesiones anteriores. Clic para tuitearTres claves para incluir el ejercicio en TU estilo de vida y mejorar tu salud y expresión corporal
1. Elige algo que te guste
Si realmente quieres que practicar ejercicio forme parte de tu vida necesitas realizar una actividad que te guste, que te haga sentir bien y que disfrutes.
A pesar de haber estudiado Ciencias del Deporte tuve grandes luchas internas con el mundo del fitness. Las formas clásicas de entrenar (como salir a correr o levantar pesos en el gimnasio) me aburrían. Y aunque me forzaba a ello, terminaba siendo una carga que no disfrutaba.
Así, es complicado engancharse…
Me preguntaba, ¿ésta es la única manera de ponerse en forma? Empecé a diseñar mis propios entrenamientos, probé mil y una actividades y finalmente descubrí Pilates. El método que realmente consiguió atraparme.
Lo pasaba tan bien que no notaba cansancio o esfuerzo, desconectaba completamente centrándome en cada nuevo reto. Estaba deseando que llegase el momento de ir a mi clase de Pilates.
Por eso te digo, busca hasta que encuentres algo que te guste.
¿Para qué quieres hacer ejercicio?
Es importante que tengas claro qué quieres conseguir a la hora de elegir actividad. De ello dependerán los resultados que logres.
Define y detalla lo máximo posible tu objetivo principal. ¿Buscas mejorar tu salud, tu estética, conseguir claridad y calma mental, socializar? Cualquier objetivo es válido, sé sincero contigo mismo.
Recuerda que trabajar con un entrenador personal te ayudará a definir exactamente qué tipo de ejercicios elegir para mejorar tu forma física de forma segura.
- ¿Qué tipo de actividades encajan con tu personalidad?
- ¿Prefieres relajarte en una sesión de yoga o descargar tensión boxeando?
- ¿Prefieres entrenar solo o buscas socializar?
- Quizás tu opción sea hacerte unos largos en la piscina o te atraiga más apuntarte a un torneo de Pádel.
¿Cuáles son tus hobbies o intereses? ¿Puedes relacionarlos de alguna manera con el ejercicio físico? ¿Te gusta la música, la naturaleza, estar al aire libre o en interiores? Ya sea salir de ruta con tus amigos los fines de semana, organizar reuniones en la pista de golf o pedalear al ritmo de la música en tu casa.
La oferta deportiva y lúdica hoy en día es inmensa y seguro que alguna encaja contigo.
Busca algo que te guste, se constante y los resultados llegarán.
2. Empieza poco a poco
Por favor, quítate de la cabeza la cultura del “no pain, no gain” que ha dominado en el mundo del fitness y nos ha hecho creer que, si no sufres, no sirve.
Todo lo contrario: el ejercicio no debe agotarte, debe llenarte de energía, debe adaptarse a ti y a tu capacidad de esfuerzo.
Así que, empieza con ejercicios sencillos y ve aumentando gradualmente la intensidad y tiempo de entrenamiento a medida que te vas adaptando al entrenamiento.
Si te cuesta introducir hábitos saludables en tu vida diaria, te presento a los mini hábitos.
Un mini hábito es un comportamiento muy pequeño que realizas de manera rutinaria Clic para tuitearEs una manera de introducir pequeños cambios en tu rutina de manera fácil, que te hacen empezar a ver resultados y te motivan a querer ir más allá.
Y mi propuesta es que empieces realizando tan solo 15 minutos de ejercicio al día.
Sí, solo 15 minutos. Requiere poco tiempo, esfuerzo y energía, es sencillo de incluir en tu agenda y probablemente muchos días excederás este objetivo, con lo que aumentará tu satisfacción. Y lo mejor: 15 minutos al día de ejercicio son suficientes para mejorar tu forma física.
3. Agéndalo
Lo que no está en tu agenda no existe.
Es fácil dejarse llevar por las urgencias, las tareas pendientes, las llamadas telefónicas y necesidades de los demás y acabar el día sin haber dedicado un momento para cuidarte.
Planifica tus prioridades del día cada mañana o la noche anterior y reserva 15 minutos para hacer algo de ejercicio, aunque sean algunos ejercicios de fuerza y estiramientos en tu silla de trabajo.
Si está programado, será más fácil organizar las tareas que surjan a lo largo del día y respetar tu sesión de ejercicio. Además, tu mente estará más predispuesta a entrenar y no buscará tantas excusas.
Puedes elegir este horario en función de tus compromisos laborales, de tu vida familiar o de tus propios ritmos biológicos. Es decir, del momento en el que tienes más energía para hacer ejercicio, o del momento en el que te sienta mejor. Quizás necesitas entrenar en las mañanas para activarte, por las noches para desconectar y terminar el día relajado, o prefieres los mediodías para aprovechar el hueco de la comida.
Tener en cuenta todos estos factores facilita adquirir este hábito, ya que sentirás que se adapta a tu estilo de vida y no al revés.
A veces, buscamos salidas complicadas teniendo la solución delante de nosotros. En este caso ni siquiera está delante. Está en nosotros.
Cuidarnos y prestar atención a nuestro cuerpo, solo unos minutos al día, puede ser la pieza que faltaba y haga que todo encaje. Que armonice cuerpo y mente para salir afuera y transmitir, comunicar e inspirar con tu mensaje.
¿Habías pensado todo lo que transmite tu cuerpo sin necesidad de las palabras?
Me encantaría conocer tu experiencia y si sientes que, a través del movimiento o del ejercicio, puedes incidir en tu ánimo, claridad mental e incluso en la imagen que proyectas.
Soy Ana Rivas, entrenadora personal. Ayudo a mujeres que tienen poco tiempo a ponerse en forma y eliminar el dolor de espalda. Quiero simplificar el ejercicio y que puedas incluirlo en tu vida entrenando tan solo 15 minutos al día y desde casa.
Sigue a Ana en su blog Respira Pilates y en Facebook
Descubre su gimnasio online de Pilates: https://estudio.respirapilates.com/
Mariví Porras dice
¡Sensacional artículo Ana!
Mi experiencia me dice que a través del movimiento o del ejercicio, sí se puede cambiar el estado de ánimo, tener más claridad mental e incluso mejorar la imagen que proyectamos.
Muchas veces no somos conscientes que nuestro cuerpo nos delata, y está diciendo algo que ni nosotros mismos sabemos que es. Nos está pidiendo ayuda y ni siquiera somos capaces de escucharle.
Qué interesante el método GDS de cadenas musculares y cómo describe las actitudes posturales y su relación con la personalidad, investigaré más sobre él, gracias por compartirlo.
Yo soy de las que hacer deporte me suele aburrir bastante y engancharme a algo es complicado, ya que no lo disfruto demasiado. Lo que sí me ha enganchado es el senderismo, y cuando puedo lo práctico disfrutando de la naturaleza, la natación en su día también me engancho y sí es un deporte placentero para mí. Pilates lo he probado y me ha gustado cuando lo he practicado, ahora con la vuelta a la rutina he comenzado con la pelota suiza y la verdad es que disfruto haciendo ejercicio con ella, y sí he notado que mi postura va mejorando 😉 y me encuentro mucho mejor.
Seguro que si sigo las tres claves que nos das para incluir el ejercicio en mi estilo de vida y mejorar la salud y expresión corporal, conseguiré tener una buena relación de cariño y placer con el deporte.
Gracias Ana por enseñarnos la importancia de cuidarnos para mejorar nuestra salud, y nuestros negocios.
¡Un fuerte abrazo!
Ana dice
Hola Mariví,
a pesar de que el deporte pueda parecerte aburrido te mantienes activa con varias actividades 🙂 Yo también he ido cambiando y haciendo por temporadas cosas diferentes, pero el Pilates logró atraparme y es lo que sigue siempre presente en mi rutina de ejercicio.
Al final, lo que cuenta es movernos.
Me encantó tu expresión: el cuerpo nos delata.
Un abrazo y gracias por compartir tu experiencia.
Sergio Melich dice
Cuando comemos juntos o quedamos con el resto de la Comunidad Fluyendo me paso el rato echando chistes solamente para que no me mires las posturas. No me gusta sentirme analizado. 😛
Pero en realidad te estoy muy agradecido por ello, porque me encantó darme cuenta gracias a ti de que mis estados de ánimo pueden estar provocándome desequilibrios a nivel postural, y darle la vuelta a la tortilla… Mejorar mi postura para corregir mis desequilibrios anímicos. 🙂
Desde que nos conocemos le hacemos más casito a la salud de la espalda, la cadera y las piernas, y eso es mágico. Además, observamos también cómo nos van sirviendo todas las propuestas que ensayamos. Un consejo que veo que también le has dado a Mariví y que arriba en el texto va de la mano con el «elige algo que te guste».
Aunque a veces pasamos temporadas donde sólo salimos a pasear, que es el fondo físico imprescindible si uno quiere ser traviajero (ya sabemos que los nómadas digitales son más de playa y piscina, je je); ahora que nos vamos de viaje nos hemos asegurado de tener gimnasio y piscina, o como mínimo un espacio diáfano, en todos los sitios donde nos alojemos. ¡Y algún uso pilatero les daremos! 😉
Un fuerte abrazo.
Ana dice
Gracias por tus palabras Sergio, me alegra mucho que ahora tengas más en cuenta la salud de la espalda. Y justo leo esto ahora que ya estás de viaje… espero que estés poniendo en práctica algunos ejercicios 🙂
Vamos a ser nómadas digitales, pero de los sanos. De los que hacen ejercicio cada día y buscan opciones saludables para comer.
En mi caso, que también estoy viajando, estoy aprovechando para practicar actividades típicas del lugar: yoga, artes marciales, surf, bailes tradicionales, trekkings,… Me lo paso genial y descubro otros aspectos de la cultura.