Los dibujos infantiles tienen algo de mágico, ¿no te parece?
Desde bien pequeños, descubrimos que podemos trazar algunas formas y que las podemos combinar. Podemos representar elementos de nuestro entorno. Podemos dibujar lo que queramos.
Dibujamos retratos de nuestras personas cercanas. Nuestros dibujos explican historias. También muestran soluciones a nuestros problemas.
Dibujamos paisajes a partir de símbolos que vamos aprendiendo: sol, casa, árbol, arcoíris… con un sentido de la composición casi perfecto.
Dibujamos con verdadero placer.
A partir de los 9 o 10 años la gran mayoría de las personas deja de dibujar.
¿Por qué? A esa edad el realismo nos apasiona y, si no conseguimos dibujos realistas, sencillamente abandonamos.
Dibujar nos permite reproducir gráficamente sobre el papel lo que estamos viendo o lo que hemos visto. Pero lo más importante, es que también nos permite plasmar lo que pensamos, imaginamos, y soñamos.
Cuando abandonamos el dibujo, incluyendo los símbolos que habíamos perfeccionado, abandonamos una buena parte de un lenguaje que ya «dominábamos», el lenguaje visual.
El lenguaje visual es la representación del pensamiento visual. La manera de representar procesos (y sus resultados) como idear, observar, analizar, sintetizar, expresar, comunicar, solucionar, crear o innovar.
Te propongo que este mes lo dediques a reaprender a dibujar y a compartir tus dibujos en tus redes sociales, tu web o tu blog.
Aquí tienes dos maneras de dibujar y compartir.
Dibuja analógico, comparte digital
Cuando recuperes a tu dibujante, puede que descubras que te gusta el tacto del lápiz sobre el papel, o hacer garabatos en las esquinas de las hojas, o escribir en grandes pizarras con tiza o rotuladores…
Perfecto: dibuja con tus materiales preferidos y fotografía tus dibujos.
¡Ya tienes una copia digital!
Para compartirla sólo vas a tener que retocarla un poco:
- Encuadra y recorta tu dibujo.
- Ajusta la iluminación y el tono si es necesario.
- Guarda el dibujo retocado.
¡Ya está listo para compartir!
Estos pasos los puedes hacer con el editor gráfico de tu teléfono inteligente. También puedes hacerlo on line, en aplicaciones como PicMonkey o hacerlo de manera más profesional, con Gimp, un programa de edición de imágenes muy potente, multiplataforma, de código abierto y gratuito.
Dibuja y comparte digital
La otra opción es dibujar directamente en tu ordenador, tablet o incluso en tu teléfono inteligente.
Tienes muchos programas y aplicaciones para elegir, tanto si quieres hacer dibujos vectoriales como si prefieres dibujar de manera parecida a cuando lo haces en papel y guardar tus dibujos como mapas de bits.
Los dibujos vectoriales te permitirán modificar los trazos, ampliarlos o reducirlos cuanto quieras sin perder calidad, incluso hacer animaciones. Te recomiendo Inkscape, un editor profesional de gráficos vectoriales, multiplataforma, de código abierto y gratuito.
Si los quieres dibujar y guardar como mapas de bits serán como fotografías: podrás ampliarlos más o menos dependiendo de su tamaño y resolución y retocarlos con un editor gráfico. Mi programa favorito es ArtRage me encanta tanto para dibujar como para hacer pinturas digitales que simulan la acuarela, el óleo o el pastel.
Pero si quieres embarcarte en aprender a utilizar un programa nuevo, aquí tienes otra opción. Utiliza las herramientas de dibujo de un programa que seguro que conoces y dominas: PowerPoint.
Con PowerPoint puedes dibujar con las formas predefinidas que propone el programa: líneas, flechas, polígonos, llamadas… Pueden ser muy útiles para hacer diagramas muy rápidamente.
Pero tienes una opción más interesante. Utiliza las herramientas arco, curva y forma libre (garabato) para dibujar los trazos que quieras. Conseguirás dibujos con la limpieza del dibujo vectorial pero muy personales. Aquí tienes un ejemplo:
Todo esto está muy bien pero, ¿cómo dibujo mi pensamiento?
Has decidido ponerte a dibujar, y ahora tu pregunta es:
«Ya tengo lápiz y papel pero, ¿cómo decido qué dibujar para transmitir mejor mis ideas?”
Dave Gray de XPLANE propone una sencilla matriz de tres por tres que te ayudará a determinar la mejor manera de ponerte a dibujar una idea. Aquí debajo tienes mi versión.
Alfabeto gráfico
El dibujo simbólico es la herramienta del lenguaje visual.
Como todo lenguaje escrito o gráfico, necesita y se sirve de un alfabeto con el que se construye un vocabulario propio, en este caso una colección de símbolos (pictografías e ideografías).
Vamos a empezar por el principio: debajo de la matriz tienes doce formas simples que se pueden combinar para visualizar cualquier cosa que puedas imaginar. Practícalas en diferentes tamaños como si hicieses caligrafía. Son tu alfabeto gráfico.
Nueve dibujos para nueve objetivos de comunicación
La matriz de Dave Gray nos propone nueve tipos de dibujos. Cada uno de ellos nos servirá para cumplir alguno de los nueve objetivos de comunicación diferentes y específicos.
Con ellos podremos contar historias visuales profundas y efectivas.
Con estos dibujos podremos representar ideas relacionadas con:
- Tiempo o secuencia.
- Diferencia, comparación o contraste.
- Relación, estructura o sistema.
Y cada representación la podremos hacer a tres niveles:
- zNivel Pensamiento (cabeza): esquemático, abstracto o lógico.
- cNivel Emoción (corazón): metafórico, que despierte pasión o compromiso.
- Nivel Acción (manos): literal o práctico.
Te propongo que copies la matriz y pienses en qué conceptos puedes utilizar dibujos parecidos. Como ves en mis ejemplos, no se trata de hacer dibujos muy elaborados ni artísticos. Se trata de representar cada elemento de la manera más sencilla que puedas.
Con estos dibujos sencillos podrás construir y representar visualmente tus ideas (o las de tus clientes), organizarlas visualmente y estructurarlas, y hacerlas visualmente claras y explícitas, para que puedas compartirlas con otras personas.
Y ahora, el momento de la verdad: practica dibujando algunas de tus ideas y acompáñalas de palabras clave para redondear los conceptos que expliques. Sin miedo, sin vergüenza.
Por último, comparte tus ideas dibujadas. Sin miedo, sin vergüenza.
Para acabar… o para que empieces otra vez a dibujar
Tus dibujos, como tus textos, son uno de los medios para expresarte y comunicarte más genuinos que tienes en tus manos, literalmente. Recuerda que ya fuiste dibujante.
Si quieres practicar y convertirte en dibujante del pensamiento, puedes apuntarte al Curso de Dibujo Simbólico.
Dedica este mes a plasmar tus pensamientos, tus ideas, tus sueños y compártelos.
Solo tienes que reaprender a dibujar.
Alicia Pueyo Azuara, Dibujante del Pensamiento.
Me apasiona crear y compartir herramientas y sistemas para ayudar a las personas a dominar profundamente su expresión y comunicación, para que puedan conseguir resultados extraordinarios en sus negocios y sus vidas.
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